Napier toma aquí un icono de la belleza "construida" - la belleza occidental del consumo y de la juventud artificial- e intenta su reconstrucción digital a partir de las huellas que su cuerpo ha esparcido a lo largo y ancho de toda la web. Nos referimos a Pamela Anderson, en su momento la mujer cuyas fotografías más se reprodujeron en la historia gracias a la aparición de Internet.
Partiendo de estas imágenes fetiche Napier intenta reconstruir un cuerpo 3D de Pamela y recrea una imagen ideal, quizás la misma que persigue Pamela y su cirujano. En lugar del bisturí, el ratón, En lugar de la piel, la pantalla.